Enfrentando las Consecuencias Una visita de vida o muerte

Recuerdo del primer mensaje :

Tomé mi tiempo para viajar... ciertamente estaba débil, sabía que mi cuerpo no resistiría otra batalla pero no había nada que pudiera hacer, tenía que hablar con los 3 reyes y aclarar todo lo que había ocurrido, estama muy conciente que esto podría significar mi muerte, pero si podía evitar que mataran a gente inocente lo haría sin dudarlo, la situación me aterraba, estaba muy mal y sabía que esa visita no tendría regreso, aun asi mi paso era firme hasta que llegue a la puerta...

Estando en la entrada me paré, no sabía que ocurriría y tenía que calmar mis emociones así que nuevamente tomé mi violín y volví a tocar en espera de cualquier cosa que fuera a pasar...


EXILIADOS

Suspiré.
-No acepten intercambios entonces, de todas formas yo ya venía a pedirles unirme a ustedes- le dije y miré como discutían de quien sería la guardia. Ahora más que nunca deseaba unirme a ellos.

Observé al vampiro que se había parado.
-¿Podrían considerar la opción de tenerme a mi también como guardia?- le pregunté -Tengo varios dones, no soy tan poderosa como Lizzy pero soy poderosa- le dije.

Lo mire.
- Marco, no nieges.
Afirme y me volvi hacia Sulpicia.
- DIJE SI.
Rei y la mire. Observe a la otra chica.
- Mmm, interesante.
Me volvi hacia ellos.
- que os parece??

Puse cara de horror y miré a Sulpicia, le hice señas de hablar a solas ... me acerqué a ella y la cojí de la muñeca llevandomela a parte.

- ¿Que pretendes? -Pregunté enojada.

Miré a Sulpicia, parecía amable.
-Acepto- les sonreí. Estaría con Lizzy al fin y al cabo.

Como pude levanté la vista y mire a los 4 Vulturis con mis ojos plateados... Me estan permitiendo vivir? pero.... saben el peligro que podria representarles? la sola idea de volver a perder el control me aterraba pero pon un lado estaba la Vulturi a quien le había gustado mi musica y por el otro estaba el que me defendía, quería responderle a ambos, estaba agradecida por lo que despues de pensarlo un momento respondí Puedo ser de ambos... como dijo ud puedo ser compañera de Musica si le complace y puede ser su guardia personal... no tengo problema alguno... me abrace para sostener mi cuerpo temblante, estaba tan dolida por las heridas que no sabia cuanto iba a resistir conciente.

Observe a Marco.
- Vaya... quien habla de modales que ni se despide de su hermano.
Suspire y observe a la chica.
- Un placer, violetista.

- No me creo, lo soy ... Athenadora Vulturi ... ¿te suena? -Repliqué enojada ... esta princesita estaba en descontrol ...

Suspire al ver a las dos chicas.
- Increible.
Me acerque a ellas y les di un golpecito sueba a las manos.
- Muercitas... ahora no.
Sonrei.

Como pude, me paré del suelo... traté de dar pasos firmes pero no podia asi que camine lento y le seguí... El placer a sido todo mio... me despedí y marche.

Bufé y miré a Cayo.

- Como desees.-Dije con voz gelida.

Me mordí la lengua para no decirle a Sulpicia lo mucho que estaba por encima de ella ...

Observe irse a todos. Me volvi hacia Athe poniendo la pose de la anza y alzando las cejas.

Me crucé de brazos y miré a los vampiros que quedaron.
-¿Dónde voy yo?- pregunté.

Sonrei.
- Adios Sulpicia, adios lilith.

Suspiré y miré a Cayo y a Caius.

-Caballeros ... creo que deben explicarme algo ...

La mire, me volvi hacia el otro.