Buscando a Franco Sileoni (Noah, Rinoa y Franco)

Finalmente había logrado que Marla me dijera donde se encontraba su gran amor, así que decidí ir en su busqueda. Quizás ella no estuviera de acuerdo, pero yo tenía que conocerlo. Rinoa me acompañaba en la busqueda, veniamos ambos montados en mi moto. Habiamos tardado unas pocas horas, cuando llegamos a París, estacioné la moto en un lugar seguro y comenzamos a caminar por las calles de la ciudad, ya era de noche por suerte.



-Rinoa, ¿sabes como encontrarlo?- Reí, yo no tenía idea. Ni siquiera sabía como era, podría haber echo un retrato hablado, pero Marla se negó a darme caracteristicas.

Seguí el aroma de Selene, y me encontré con ella nuevamente -¿Ya lo encontraste?- Pregunté expectante, Rinoa se nos unió al cabo de unos segundos.

Había estado toda la tarde en el Museo de Louvre, cuando me di cuenta ya era de noche, me dispuse a salir, la entrada se encontraba llena de gente. Al parecer era una de las horas en que mas visita recibía el Museo, me dió un pesar ver a gente entrar corriendo, sabía que se necesitaba todo un día para recorrerlo completo y ellos recién venían. Por mi parte no había visto todo, pero ya tendría tiempo para hacerlo luego, habían otras cosas que inquietaban mi mente, miré hacia arriba, suspiré y comencé a andar, iba mirando unos catalogos. La historia del Museo era impresionante, recordé a Marla, imaginé cuanto le gustaría a ella estar aqui viendolo, y cuanto me gustaría a mi que asi fuera.

Iba detrás de Selene atento a cualquier señal que diera de encontrarlo. Selene parecía muy confiada, y eso me animaba. Ibamos llegando al Museo de Louvre, alrededor habían miles de turistas.

Caminaba leyendo los catalogos por lo que no noté cuando de repente tropece con alguien, como iba distraido caí al suelo -Lo siento- Dije desde el suelo, cuando observé con quien habia tropezado noté que era un chico, menor que yo ... lo quedé mirando, su cara me recordaba a alguién. El venía con dos chicas, una de ellas era alta, de pelo castaño, se notaba que amaba la moda, la otra era... sorprendido dije -¿Selene?- Al tiempo que me paré

Dí un soplido a mi cabello al escuchar a Rinoa -Si tuviste...- No alcancé a terminar la frase, pues un chico tropezo torpemente conmigo por lo que cayó al suelo. -No te preocupes- Le tendí la mano para ayudarlo, cuando veo que conoce a Selene ... ¿Franco?.

El chico con el que tropecé me miro fijamente, cuando ya estaba de pie pude notar que realmente si se trataba de Selene, sonreí al verla. -A mi también me da mucho gusto- Miré a ambos chicos que le acompañaban cuando digo sus nombres, Rinoa y Noah, sonreí estupidamente al pensar en la rima de sus nombres. Los miré detenidamente, sus rasgos... si, definitivamente eran vámpiros, estaba pensando en eso cuando la chica se abalanzó sobre mi para abrazarme, instantaneamente me sonrojé cuando lo hizo, luego me sonrió y me hablo de Marla. -¿Conoces a Marla?- Me esperanzé, y sonreí. Selene seguía junto a ella, y el otro chico aún no decía nada pero seguía mirandome.

Seguía mirando a aquel chico, había reconocido a Selene y por la respuesta de esta, sabía que era Franco. Sonreí, ví la reacción de Rinoa, y luego oí como ambas discutían de su aroma.

Me acerqué a Franco y le dije -Asi que tu eres por quién mi hermana esta así- Lo miré fijamente, no había sonrisa en mi rostro. Luego agregé -Y exageran, no hueles tan bien-

Miré a Rinoa, ¿llevarme a Forks o convertirme? en que estaría pensando, sonreí ante esto, parecía una chica simpatica. -Claro que la conozco, ¿Llevarme a Forks, de que hablan?-

El chico se acercó y me miró fijamente, aguanté su mirada, trataba de no mostrar miedo. Pero a pesar de todo no lo tenía, nunca se los tendría, podrían ser vámpiros, pero yo tenía una determinación y algo que hacer, no podía mostra miedo. Luego me habló y unniendo cosas exclamé -Así que tu eres su famoso hermano!- Lo miré expectante.

Cuando Rinoa me hablo, me gire para mirarla -¿Thais?, si... si la conocí, pero parece que no le agradé. Hace algunos días cuando ella y Selene vinieron Thais se pusó mal al mirarme, sus ojos cambiaron de color-

Miré a Rinoa como se comportaba con Franco, algo me hacía pensar que su aroma resultaba muy atrayente para ella, asi que un susurro le dije -Rinoa, Marla no ha consentido su transformación-

Luegó me dirigi a Franco -Al parecer ya sabes quién soy - Le sonreí. Tragué saliva cuando habló de Thais, aún estaba preocupado por ella.

-Y si, creo que lo mejor será irnos a Forks ¿Pero como nos iremos?-

Miré a Selene, en busca de una explicación. Todo esto era muy raro, Rinoa quería llevarme a su casa, hace unos momentos se encontraba muy contenta y ahora todo cambió. Noah decía que no ibamos a Forks y yo no entendía nada de nada. Los veía hablar...

-¿Porque han venido por mi?- Pregunté insistentemente.

Miré alarmado a Rinoa, su risa se habia desvanecido al escuchar lo de Thais, y yo me comenzaba a alarmar mas aún. ¿Habría tenido algo que ver Franco en lo que le sucedía a Thais? No quería ni pensarlo.

Miré a todos expectantes pero me centré en Selene al oirla -Claro que quiero verla- Dije riendome y a la vez algo ruborizado.

Luego miré a Rinoa, se le veía preocupada me acerqué y la miré a los ojos. Si, había algo que le preocupaba y yo quería apoyarla. SIn pensarlo expresé -Sabes... sea lo que sea que pase, de seguro todo saldrá bien- Sonré tratando de animarla. Y luego me dirigí a los otros -Entonces, ¿Nos vamos?- DIje sonriendo y esperanzado ante lo que me esperaba.

Me acerqué a Rinoa y le agarré por el hombro ydije -Parece que no eres un humano común- Le sonreí. Luego lo vi decidido a irse, de seguro era especial, habia algo en lo que se notaba. Ya vería en casa como se comportaba -Esa es la actitud Franco!- Exclame emocionado, al parecer nos llevariamos bien.