Habitación 420 (Lillith)

Recuerdo del primer mensaje :

El ascensor paró en el cuarto piso y salí. Caminé hacia la habitación luego de verificar que Brandon me siguiera y cuandos los dos llegamos a la puerta la abrí y entré.
-Pasa- le dije mientras le sostenía la puerta.

no gracias no tengo mucho apetito, es bueno que tengas donde vivir asi no gastas mas dinero aqui

Me reí.
-Si, más que nada es porque no me gusta demasiado un hotel. No puedo tener las cosas como yo quiero- dije pensativa.
-Bueno, si no quieres comer aqui ¿Te gustaría ir a mi nuevo hogar? Cuando tengas hambre podremos comer algo allí- le ofrecí con una sonrisa.

no gracias eres muy amable pero creo que dbo volver a la casa de aurore ella se preocupara si no vuelvo, lo digo por que soy su invitado

Sonreí y me encogí de hombros.
-Supongo que tienes que irte. Ella es tu amiga- dije y miré el techo. -Si quieres te alcanzo en el auto- agregué sin dejar de mirar el techo y con cara seria.

no gracias prefiero caminar, no es por desprecio ni nada

-Está bien, haz lo que quieras- le respondí sin dejar de mirar el techo. Era un humano, prefería a Aurore, otra humana. Debía aceptarlo, al fin y al cabo no era realmente importante.
-¿Te vas ahora? ¿Te acompaño abajo?- le pregunté en un intento por ser amable.

quieres que me valla???

-En realidad, no ¿pero no tenías que ir con Aurore?- le pregunté dejando de mirar el techo y mirándolo fijamente a los ojos.

si pero, puedo quedarme un momento mas aqui contigo verdad?? solo si es que tu lo deseas (:$)

Me reí.
-Por supuesto, puedes quedarte- le dije sin dejar de mirarlo.
-Aunque también... podrías ir un momento a mi nueva casa...- agregué divertida y le sonreí -Era broma, quedémonos aqui- le dije.

ha como gustes tu. ire a donde gustes ir tu.

Le sonreí.
-¿Cuánto tiempo te queda antes de tener que volver con Aurore?- le pregunté.

no lose el que tu quieras supongo

Me paré y le tendí la mano.
-¿Serías tan amable de acompañarme a mi nuevo hogar entonces?- le pregunté sin dejar de sonreírle.

como gustes le da la mano y se levanta

Le sonreí y salí de la habitación tomando las pocas cosas que tenía allí. Bajé y en recepción dejé mis llaves y le pagué al recepcionista los días que me había hospedado allí. Pedí que trajeran mi auto y cuando lo hicieron me dirijí hacia él junto con Brandon.
-Sube- le dije mientras subía del lado del conductor -Te prometo no pasar los 100 km/hr- agregué recordando la vez anterior que se había asustado por mi forma de manejar.

eso espero, ojala no pasaras los 80 jeje. subiendose al lado del copiloto

Arranqué y comencé a ir a 60 por las calles principales de Forks hasta llegar a la carretera donde aceleré hasta los 80 km/hr.
-Aquí en la carretera voy a menos de 80 y van a pasarme por encima- le dije con una sonrisa -¿Está bien así?- pregunté refiriéndome a la velocidad.

si deseas sube un poco la velocidad asi llegamos mas rapio a tu casa y me quitas mas rapido esta tortura del automovil

Aceleré a 90 y lo miré.
-¿Qué problema tienes con el automóvil?- le pregunté. A lo lejos ya empecé a oir el sonido de la cascada de la casa, pero faltaban un par de kilómetros para llegar y Brandon no podía oírlo todavía.

mmm ninguno

pensado en la mentira que le habia dicho ya que el un tiempo atras tuvo un accidente automovilisto, era piloto de carreras.

Sonreí ante su mentira.
-Si quieres no me cuentes, pero tampoco quiero que me mientas- le dije volviendo a mirar la carretera y mirándolo de reojo. Ya empezaba a asomar la cascada por detrás de unos árboles.
-Estamos llegando- le avisé doblando en un camino de tierra que te internaba dentro del bosque.

tienes razon no tengo para que mentirte yo era piloto de carreras hasta que sufri un grave accidente choque con un barandal y mi auto se izo trisas, yo y mi compañero sufrimos las consecuencias pero el lastimablemente fallecio, luego de eso me retire y no quise seguir mas en las carreras, he hay mi miedo a los autos y a la alta velocidad

Asentí en señal de comprensión.
-Es entendible- le dije -Pero tú más que nadie debes saber que si uno es un buen conductor la velocidad no es tanto un peligro. Claro que no me conoces y no debí haber acelerado de esa forma la primera vez que nos vimos, fue irreponsable de mi parte y te pido disculpas por eso- agregué luego. Me sentía culpable por haberle hecho eso sin saber que él habría sufrido mucho antes por un accidente automovilístico.

descuida debi habertelo dicho al instante