Encuentro, desiciones dificiles

Después de clases maneje en mi volvo hasta seattle, que es esa chica! por que no podia dejar de pensarla, sentia una fuerte conexión con ella pero era como mirarme en el espejo y ver reflejado a un enemigo, bajé y comenzé a caminar por las calles -estupida...- como me la sacaba de la cabeza?

Terminando las clases me despedí de Thais y Demi y en seguida trate de despejar mi mente por lo que decidí salir de compras a Seatle, mas que nada queria una escusa para alejarme y si seguia aqui sabia que en cualquier momento podía toparme de nuevo con Cullen por lo que mientras mas lejos mejor, me subí a mi moto y me fui.

Llegué a la ciudad y aparque en el centro comercial, sin embargo no entre, decidí camirar un poco para aclarar mis pensamientos... Cullen, por que me irritaba tanto? no era lógico, en mis 269 años jamás me había alterado tanto por alguien, es que es... es frustrante el poco rato que estuve dentro de su mente noté que teníamos mucho en comun, era inaudito que teniendo tanta similitud pudieramos chocar tanto, es decir... en cuanto lo vi quise arrancarle la cabeza.

Cuando reaccié estaba en la entrada de la tienda que quería, amablemente me atendío Miss Grey, desde que conocí esa tienda ella había sido la encargada de atenderme, pero ciertamente no habia mucha interaccion entre nosotras, ella solo queria obtener las ventas y yo solo queria comprar mis instrumentos Miss McBeth, cuanto sin verla por acá, ya empezabamos a extrañarlasabía que lo que decía era una mentira y no presisamente por que leyera su mente, sino que bastaba con verle la cara para saber que lo único que le interesaba era el dinero, sin embargo, fuí cortés y la salude amablemente Buenas Tardes Miss Grey, vine para ver si ya estaban las cuerdas del violín que le encarguéAhhh, pero por su puesto que si !!! de hecho, yo misma estaba por llamarle esta misma tarde, verá, nos acaban de llegar nuevos instrumentos que estoy segura le encantaría probar al principio no le presté atención, pero en cuanto giré mi vista ahí estaba el piano más hermoso que hubiera visto, Miss grey siguió mi vista y de inmediato supo que era venta seguraCon toda confianza puede irlo a probar si gusta, sabe que no hay compromiso...no le hice mucho caso y de inmediato fuí hacia el.

El piano estaba en exhibición por lo que estaba junto a las ventanas que daban hacia la calle, de inmediato me senté frente a el y con mis manos pase una por una cada tecla, sintiendo el dulce tacto, con mi otra mano realicé el mismo moviento hasta que ambas estuvieran en posición y de ahí empecé a tocar sin preocuparme del alrededor....

Sonata de Clair de Lune

Mientras mas la pensaba mas me confundia...como podia ser aquello, no podia siquiera leer su mente pero ella la mia si, tendria que hacer algo al respecto, momentaneamente escuche un vago sonido, era la melodia que mas me gustaba despues de la lullaby de Bella, gire la calle y entr un local donde al parecer habia muchos instrumentos, mire de derecha a izquierda, escrutando cada centimetro del lugar, hasta que me topé con su rostro, demonios...gire sobre mis talones intentando pasar desapercivido, haha como si pudiera, en fin, lo que sea con tal de alejarme de ahi, llegué hasta la puerta y la melodia se paro de golpe, genial me habia visto.

Y ahí estaba el, de todos los lugares posibles, tenia que encontrarlo presisamente ahí no se que fué pero mi cuerpo se levantó y fué directo hacie él, si aclararíamos las cosas sería el momento Huyendo Cullen? podría jurar que el que me persigue eres tu me reí Sabes perfectamente que tienes dudas sobre mi, pero por que no eres claro? le dije en su mente Después de ti con mi mano señalé hacia la salida...

-no mal iterpretes la situación- sali y comenzé a caminar por la calle - no entiendo, por que no solo te alejas- metí mis manos en las bolsas de mis pantalonsillos

Por que sabes lo que soy y aun así te niegas a admitirlo... le dije mientras le miraba firme a los ojos Tu no representas peligro para mi, pero yo para tí si Me alejé de el unos pasos y caminé delante suyoPor que no puedes entender que ni siquiera yo sé por que siento esto? siento miedo, mucho miedo, pero no es de tí, tu presencia me altera y no se si estar a la defensiva o atacar sin piedad pensaba una y otra ves sin dame cuenta que había bajado la guardia y había dejado mi mente abierta...

Perfecto un desliz...vaya que es mas rara de lo que pense -se lo que eres, no me molesta, lo que me perturva es que no se por que me molestas!! es dificil como querer y odiar a una persona, por cierto...eres rara- hize una mueca de disgusto graciosa y después rei

Te recuerdo que el que me encontró fuiste tu... pero tienes razón, estoy atraida a ti peor que sombra, no mal interpretes mis palabras, es que... no puedo entender como por que siendo tan parecidos, los 2 no podemos soportarnos Admitelo Cullen, todo está en tu cabeza...le dije en su mente antes que lo negaraHablando de rarezas...sonreí divertidamenteEres el primero que lo toma así, o al menos de esa forma... muchos en tu lugar ya hubieran tratado de defenderse o incluso huido volvi a reir...

Por primera vez desde que había llegado a Folks bajé la guardia... mi sudoración en la frente se hacía notoria, la agitación de mi respirar, el dolor cada vez era más fuerte. Ninguno de los vampiros ahí conocía realmente mi naturaleza, había un secreto que guardaba recelosamente... traté de mantener la cala, sin embargo, perdí el equilibrio un momento...

- vaya vaya vaya...entonces deberia cuidar mi espalda no es asi?- mufé ~en mi cabeza...claro~ -que te sucede?- dije mirandola con curiosidad, se notaba un poco rara y por extraño que paresca me preocupe un poco, si si lo se... nuestro comportamiento es un poco voluble, pero su cambio es muy repentino ~que es lo que ocultas?~

Rayos... por que tenía que pasar esto aquí y ahora? pense para mi. Al sentir que Edward trataba de entrar en mi mente, le advertí Cuidado Cullen, puede que lo que averigues no te guste..., aún en mis pensamientos mi voz era entre cortada, realmente estaba sufriendo un ataque fuerte, sin pensarlo me recargue en la pared y poco a poco me fui dejando caer para quedar sentada en el piso Disfruta lo que vez, no todos los dias... me tienes a tus pies... traté de hacer una broma, pero el dolor era más y más que no sabia cuando iba a resistir...

Me recargué en la pared poniendo mis brazos a sus lados, baje lentamente al igual que ella quedando hasta su altura...- me dejas entrar?- pregunté, no seria una buena idea entrar por la fuerza en su mente,pero quizá si miro lo que le sucede pueda ayudarla de alguna forma...

Yo te lo adverí... levanté mi mano izq y me quité el guante con la boca, segundos después coloque mis gélidos defos sobre su frente...

Yo sé que no soy normal como los de nuestra especie, no es normal el hecho que me exaltara un vampiro, como el humano a éste, durante todos estos años aprendí a calmar mi sasiedad de hambre alimentandome de animales ya que la sangre humana me daba asco.

En mis venas, la sangre que corre no es solo sangre, sino veneno puro, el mismo que todos ttenemos cuando mordemos a alguien para trasformarlo, el mismo que transita por todo mi cuerpo sin sesar... el mismo que también contienen mis uñas, he ahí uno de los motivos por el cual utilizo guantes, para cubrir mis largas y filosas garras y también para ocultar aquella marca que me persigue. Aquella pelea que tuve con Dimitri, recuerdo que el mordió mi mano antes de que le arrancara la cabeza, al principio no le tome importancia pues sabía de mis poderes curativos, sin embargo, con el tiempo ví que el dolor no disminuía, a pesar de los años este nunca desapareció, aprendí a lidiar con el, sin embargo de vez en vez el dolor es insoportable, tanto el veneno como la herida hacen estragos en mi cuerpo justo como en este instante... estaba tan agotada que lentamente dejé caer mi mano sobre su rostro ahora entiendes Cullen, el peligro soy yo, no tu... le dije casi en susurro...

- entiendo...pero tu herida...esto no es normal, ni para un vampiro, dejame ver- le dije mientras la miraba a los ojos

Lo miré por un momento y decidí hacer lo que me pedía, levanté mi mano derecha he intenté sacarme el guante cuando un dolor intenso recorrio todo mi brazo, me retorcí de dolor mientras con mi mano izquierda me lo sostenía, pero era tan insoportable que terminé encajandome mis propias uñas y por primera vez en mis 269 años solté un grito de llanto por el dolor...

off: mansión Cullen