Saliendo con Felix

Por nada en especial.

Le sonrei de forma tranquila, tras volver a abrazarla, apegandola a mi con anhelo, deseaba por todo en el mundo que nunca terminase aquel momento, y haria todo lo posible porque asi fuese.

Lo siento...

Dije algo preocupado. Otra vez no podia medir el encerrarme en mi mundo, aunque no fuese mi intencion. Me senti mal por no poder expresarle mis sentimientos...No podia, no era que no quisiese...pero se me hacia casi imposible, ya estaba acostumbrado a mi umbral personal.

Siento no poder explicar lo que siento.

Escondi mi rostro en el hombro de la muchacha, abrazandola con apego y aferrandome a ella con necesidad.

Senti sus caricias sobre mi cabello, eran tan dulces que hasta podian enternecer a mi vampirico corazon si eso es posible...Que era esta extraña sensacion cercana a la necesidad de estar cerca de ella? ...Por que Heidi? Le conoceria desde muchos años trabajando como guardia...pero desde que me confio aquel lugar, desde que sus manos se cruzaron y juntaron con las mias, me hacia verla diferente...mucho mas cercana, y naturalmente necesaria.
No me movi con miedo de romper aquel momento, no me alcanzaba la fuerza y acto de un abrazo para llenar las ganas de tenerla.

No comprendia del todo con exactitud aquella situacion, pero me agradaba, la sensacion sentida en ese momento preciso, no era felicidad, era algo mucho mas grande, y no tiene nombre,no se como describirlo.

Aun me siento mal por encerrarme tanto, pero, en Heidi sentia la necesidad de confiar, despues de todo ella parecia haerlo en mi, y yo, necesitaba confiar en alguien. Mas despues de casi 200 años en soledad.

Derepente senti un calido beso sobre mi cabello. Mi cabeza habia sido besada por los dulces labios de Heidi. Nuevamente, si mi condicion me lo permitiera, me hubiese sonrojado. Pero no lo hice.
Acto reflejo seguido a la demostracion de cariño por parte de la vampirica chica, alce mi diestra, acariciando su angelical rostro, uno muy apacible para ser una mujer vampiro, y actuando sin mi concentimiento psicologico, mi rostro se acerco al de ella lentamente, intentando recapasitar sobre lo que hacia,pero sin embargo no me dentedria. Callado pero no inseguro, aclare sobre mi mismo en mi mente.

Repose mi frente sobre la de la chica, separandonos apenas por unos centimetros insignificantes que podian ser rotos facilmente si alguno de los dos hacia un movimiento en falso. Y lo hice, la aferre un poco mas a mi, tomandola de la cintura de forma delicada para no lastimarla, como si fuese una fragil humana, e interrumpi esa corta distancia entre ambos, apegando lenta y cariñosamente mis labios a los de ella. Sabiendo incluso que, podria ser altamente rechazado, por primera vez estaba siguiendo lo que su corazon dictaba, y este, lueg de muchos años en silencio, resucito para dictarle que se acercara a ella.

Todo se habia vuelto muy extraño en el ultimo dia, como podria haber cambiado tantola relacion entreHeidi y yo en tan solo un rato que compartieramos? Muchos dirian que estabamos predestinados a encontrarnos de forma cercana algun dia...yo no se si decir eso, es una opcion. Lo unico de lo que puedo estar seguro, que muchas mas de esas preguntas llegaron a mi mente luego de unos segundos cuando note que mis labios aun se fundian con los dulces labios de la muchacha.

No podia evitar no separarme aunque talvez fuese molesto para ella.Era como una adiccion. Simplemente, continue besandola, y al sentir que sus brazos rodeaban mi cuello, correspondiendo lentamente al beso, una profunda sensacion de lleno en mi se hizo presente.
A esta altura, no podia parar, necesitaba besarla continuamente, sin dar lugar a palabras.

No queria que ese perfecto momento acabase...no podia dejarla, que pasaria luego? Talvez todo volviera a ser lo de antes y no lo queria, me habia mostrado tanta libertad...donde y como liberarme de mi monotonia de guardia...Era como si fuese una necesidad para mi, de un momento a otro, lo cual me desconcertaba a ciencia cierta.
En tal momento, no tuve momento de refleccion, solo podia concentrarme en sus labios, tomandola de la cintura, necesitando que fuese mia entonces. Y asi fue, no me despegaria de ella hasta que sus labios fueran los que me quitasen de ahi.

Al separar mi labios de los de Heidi, estaba completamente perplejo...temia lo que ella pudiera pensar, y si se molestaba conmigo por lo sucedido?
Pense en disculparme, pero como lo haria...No me alcanzaba la fuerza para hablar, ni para musitar palabra alguna.
De pronto senti que sus labios rozaron fugazmente los mios una vez mas.
Como debia reaccionar entonces...?Ella no estaba molesta...?
Aunque no lo estuviese, debia pedir disculpas.
Suspire algo melancolico para asi juntar valor.

Disculpame...

Musite en un hilo de voz muy bajo, que tal vez ni siquiera un vampiro podria percibir.

Lo...-Me interrumpi, ya que iba a disculparme nuevamente casi por inercia.

Ademas, Heidi me aseguro que no tenia problema con lo sucedido...tal vez lo dijese para mi tranquilidad, mas sabiendo como soy.

Segura...que no tienes problema...con lo sucedido...?

Abri mi boca a punto de decir algo, pero no habia palabras suficientes o correctas para el momento.
No sabia que decir, por lo que me quede en silencio durante largos segundos de refleccion interna.

Gracias.

Musite con voz pasiva.

Rei de forma divertida ante su comentario.

Tu siempre te ves linda.

Agregue de forma segura mientras la observaba constante, sin perderle rastro ni un momento.

Oye..el timido soy yo.

Le dije sonriendole de forma un tanto seductora, despues de todo, parecia que las posiciones se habian dado vuelta.

Ademas tu comenzaste con los halagos.

Sonrei de costado, cruzandome de brazos.

Estuve por decir algo, pero aun asi, me quede en silencio, acercandome a Heidi en silencio, hasta estar lo suficientemente cerca para tomarle en brazos, pasando mis brazos por detras de su cintura.

Yo no hice nada, linda.

Sonrei por mi ironia en las palabras dichas.

Rei ante el comentario de Heidi, siempre es tan decidida, no podia creerle que tuviera verguenza o que su timidez naciera justo para el momento.

De acuerdo. - Interrumpi con una risa.

Es mi culpa, ya?

La observe fijamente, sonriendole de forma cariñosa.